En esta nueva etapa que nos toca vivir, tendremos que hacer frente a muchos sentimientos, pensamientos y emociones nuevas que, con seguridad, irán surgiendo. De la misma manera, tendremos que aprender a cómo poder desprendernos de algunas que otras emociones vividas durante este periodo de cuarentena y confinamiento y, además, aprender a convivir con nuevas situaciones y realidades.
Para ello, ofrecemos diez consejos prácticos que pueden ser de ayuda a la hora de enfrentarnos a esta nueva etapa con nuestros hijos:
- Ayúdale a reconocer las emociones nuevas que le pueden están surgiendo: Es importante conocernos para entendernos, para enfrentarnos a esas emociones y poder vivir con ellas, entender, según la experiencia individual, que pueden ser muy cambiantes por momentos (miedos, estrés, bloqueos, ansiedad, tristeza, culpa, ira…). Háblale de tus emociones para que pueda verse reflejado y así comprender las suyas.
- Estimula su capacidad empática: Esa que nos ayuda a seguir conectados con los demás, a pensar en el bien común, en la responsabilidad social, y en todo lo que de forma global hemos vivido conjuntamente.
- Continúa reforzando su solidaridad: Comprometidos con este objetivo común de poder transitar hacia espacios de normalidad. Teniendo en cuenta mi libertad individual pero también la libertad, los derechos y los cuidados hacia los demás.
- Seguir fortaleciendo su capacidad de resiliencia: En este tiempo de superar obstáculos, sigamos trabajando en estas nuevas habilidades y oportunidades para salir fortalecidos, para transformar la adversidad en oportunidad. Es el momento de desplegar todas nuestras fortalezas y capacidades.
- Continua ayudándoles a mostrar flexibilidad: Aprender a relacionarse de otra manera, a actuar de forma distinta, a ver y a percibir el mundo totalmente diferente.
- Refuerza su creatividad: La creatividad en la toma de nuevos hábitos y rutinas acordes con la situación, puede ser una herramienta que le ayude en este proceso de adaptación.
- Aumenta la comunicación en familia: Necesitamos anticiparles la situación, hablar sobre las normas que deben seguir en las salidas, sobre cómo deben comportarse, lo que pueden o no pueden hacer dentro de las recomendaciones de las autoridades sanitarias, responder sus dudas y si no sabemos algo, buscarlo juntos, siempre en fuentes oficiales de información.
- Destaca su responsabilidad: Saber lo que se espera de él/ella le va a permitir hacer las cosas de la mejor manera posible.
- Ayúdales a ajustar sus expectativas, han cambiado muchas de las costumbres que teníamos, conocer esos cambios les ayudará a afrontar la frustración que puedan generarles y a evitar decepciones.
- Y sobre todo respetar: Respetar los tiempos de cada uno. Salimos de una situación muy larga de excepcionalidad y cada uno tiene que seguir su ritmo. Escúchale, ofrécele calma y seguridad y respeta que necesite un tiempo para ir asimilando lo ocurrido pero no le dejes estancarse. La normalidad tiene que ir llegando, pero no le presiones para que ello sea rápido, cada niño va a necesitar un ritmo diferente a la hora de enfrentarse a esta nueva situación.
Y recuerda que, como padre y como madre, has estado en todo momento haciéndolo lo mejor que has sabido y podido; busca apoyo si lo necesitas. En estos momentos, más que nunca, es importante que nos escuchemos, compartamos y hablemos con las personas cercanas, o si es necesario, con especialistas que seguro, nos ayudarán a entendernos.